El expresidente de México Enrique Peña Nieto reaccionó ante la denuncia que el titular de la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF), Pablo Gómez, presentó en su contra ante la Fiscalía General de la República (FGR) por el posible delito de operaciones con recursos de procedencia ilícita, conocido también como lavado de dinero.
En un par de mensajes en su cuenta de Twitter, Peña Nieto se dijo confiado en que se le permitirá aclarar cualquier cuestionamiento sobre su patrimonio el cual, dijo, es legal.
“Expreso mi confianza en las Instituciones de procuración y administración de Justicia”, escribió.
demostrar la legalidad del mismo, dentro de los procedimientos legales.
Expreso mi confianza en las Instituciones de procuración y administración de Justicia.— Enrique Peña Nieto (@EPN) July 7, 2022
Durante la conferencia de prensa matutina del presidente Andrés Manuel López Obrador, Gómez informó que, luego de un análisis de reportes financieros se detectó “un esquema donde un expresidente de la república obtuvo beneficios económicos”.
“Se detectó que el exmandatario, a través de transferencias internacionales, recibió 26,001,429.74 moneda nacional”, denunció el titular de la UIF.
Gómez detalló que estos recursos fueron transferidos por una familiar consanguínea del exfuncionario desde una cuenta en México hacia España, en donde se sabe que reside actualmente el exmandatario.
“Los depósitos mencionados resultan relevantes debido a que al tratarse de operaciones en efectivo no se conoce cuál es la fuente aunado a lo anterior”, explicó el funcionario.
De acuerdo con Gómez, Peña Nieto comparte la calidad de accionista en dos empresas con familiares consanguíneos que realizan operaciones por montos elevados, y detalló que se tratan de empresas familiares existentes desde antes de que fuera presidente. Las empresas, dijo, “tiene una relación simbiótica con una persona moral de carácter internacional que se benefició de contratos del gobierno federal durante su administración”.
Al respecto, el presidente Andrés Manuel López Obrador declaró durante su conferencia de prensa mañanera su gobierno no protegerá a nadie, pero, sentenció, tampoco fabricará delitos.
Aunque López Obrador afirmó que, si la Fiscalía General de la República integra una investigación con pruebas suficientes para que un juez determine consignar, su administración impulsará que el caso no se quede “empantanado” y que las acusaciones se queden en un simple “circo” o un “espectáculo”.